Panamá, 1830-1887
EL ÚLTIMO CREPÚSCULO
El sol en el ocaso apenas arde...
Vienen las sombras de la noche oscura
tras la luz vacilante de la tarde,
y el viento entre los árboles murmura.
Así también, mi sol oscurecido
se lleva de mi vida el dulce encanto...
¡Entre tinieblas vagaré perdido,
y cesará mi triste y flébil canto!
Comentarios
Publicar un comentario