HUGO ANA MERCIER

Matanzas-Cuba, 1916-1976

EQUIS

Aguas venidas sin saber de dónde
como límpido abrazo de ventura
para medir la última estatura
de esta impaciencia que mi sangre esconde.

Aguas venidas en la hora plena
en que el mundo distante se perfila
dentro de la recóndita pupila
que agranda su dolor sobre la arena.

¡Oh, blanca religión que, íntimamente,
vas descendiendo en luz sobre mi frente,
igual que un ala por la brisa herida…

Como si toda la órbita celeste
se me abriera de pronto para este
meridional trasiego de mi vida.

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